Las últimas investigaciones en el campo de la construcción de estructuras de hormigón tienen como objetivo avanzar en dos premisas fundamentales, la seguridad de la obra y su durabilidad. A su vez, el control de calidad de la obra es imprescindible para evitar tragedias como el fatal derrumbamiento del viaducto en construcción ocurrido en Belo Horizonte, Brasil, el jueves 3 de julio.

Fusionar el diseño de construcciones duraderas y seguras con el avance tecnológico de los materiales, no es una tarea sencilla, pero es fundamental para cubrir las demandas de un crecimiento poblacional ascendente. En Argentina, el Centro de Investigación Nacional de Reglamentos para la Seguridad de las Obras Civiles (CIRSOC) del cual la Facultad de Ingeniería participa activamente, elaboró con mucha dedicación las nuevas directivas en diseño estructural, que incorporan investigaciones nacionales de los últimos 25 años.

La Segunda Generación de Reglamentos Cirsoc de estructuras de hormigón apunta a profundizar en los proyectos y diseños de estas estructuras y al emplazamiento de estructuras durables, resistentes para una vida útil de al menos 50 años. La normativa es difundida a través de un arduo trabajo como el que lleva adelante la docente de la FIO Norma Ércoli, especializada en el campo de las estructuras de hormigón y que días atrás brindó un curso de actualización invitada por el Departamento de Ingeniería de la Universidad Nacional del Sur, en Bahía Blanca.

Durante dos días, la ingeniera expuso ante un importante grupo de profesionales y estudiantes avanzados de ingeniería y arquitectura, las nuevas directivas vigentes para el diseño de estructuras de hormigón, orientadas a mejorar la seguridad y durabilidad de las obras.

La propuesta generó un gran interés y dejó en evidencia la importancia del perfeccionamiento en el tema, como en el conocimiento del desarrollo tecnológico de los materiales. "El diseño, la durabilidad de las estructuras de hormigón y su instalación en convivencia con el medio ambiente donde está emplazada, son aspectos que están alineados con los códigos más modernos", indicó Ércoli. Este nuevo reglamento incluye códigos actualizados y coherentes no sólo para el hormigón sino además para varios materiales estructurales como el acero, el aluminio, la madera y la mampostería, al nivel de los códigos internacionales.

De acuerdo con la ingeniera, el Reglamento de a poco se difunde a lo largo y ancho del país y "encuentra lineamientos en común con el cógido americano y el europeo, con gran impronta vanguardista", afirmó.

Control de calidad

Cuando el profesional proyecta y diseña una obra con un determinado destino, tiene que realizar un control de calidad que asegure la seguridad estructural para cumplir su función, y debe contemplar la seguridad durante todas las etapas del proyecto, incluido el período constructivo como el que atravesaba el viaducto derrumbado en Belo Horizonte. Algunas obras durante su etapa de construcción soportan mayores cargas que las que va a tener durante su vida en servicio.

En la Argentina, la Dirección Nacional de Vialidad categoriza los caminos en función del tránsito y la ruta donde se emplazará. "Las obras se diseñan para que las personas las puedan utilizar sin inconvenientes, durante varios años y sin un deterioro que impida o disminuya la posibilidad de uso, o que afecte la integridad de las personas", destacó la ingeniera María Haydeé Peralta, quien también trabajó en el nuevo Reglamento.

Actualización y desarrollo

Cerca del año 1998, el Centro de Investigación Nacional de Reglamentos para la Seguridad de las Obras Civiles (CIRSOC), comienza a notar una pérdida de actualización de los reglamentos frente a la apertura mundial y el conocimiento en otros países. Se generaron nuevos reglamentos a través de un trabajo muy arduo de comisiones redactoras en las que tanto la Facultad de Ingeniería como el Colegio de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires, Distrito III, han intervenido y Norma Ércoli ha sido una de sus mayores representantes. "Hubo que buscar la aprobación, que llegó con una resolución del Ministerio de Planificación de la Nación", contó la investigadora. La puesta en vigencia de la nueva generación fue el 1º de enero del año 2013.

Por el carácter federal de nuestro país, cada una de la provincias y municipios a través de sus poderes legislativos, deben incorporar esta herramienta para sus áreas de incumbencias.
"Es fundamental para la Facultad la trayectoria previa mediante estudios, investigaciones y aportes de sus desarrollos. Ahora se encuentra en una etapa de poder incorporarse al sistema de propuestas de actualización, lo cual significa que a nivel nacional ha tenido gran participación y puede satisfacer las demandas profesionales", expresó Ércoli.

La institución ha participado en los foros de discusión pública a través de los cuales se diseñó el nuevo reglamento. Actualmente se trabaja en reglamentos de puentes inéditos en el país y de fundaciones, con una gran impronta innovadora en el desarrollo estructural.