Con los ecos de la visita del Presidente del CONICET aún frescos, el mundo de la investigación de la FIO redobla sus esfuerzos. Al comando de esa gestión, el Dr. Rossi se recuesta sobre la posibilidad de estrechar el vínculo con los sectores productivos, escuchar sus necesidades y orientar el mecanismo académico hacia ese lado. Cree que la Facultad ha recorrido un camino saludable para llegar a ese punto. Y abre puertas al futuro...

¿Cómo definiría el estado de situación de la FIO a este momento? Para hablar de hoy me tengo que remontar un poco en la historia. Desde hace ya varios años, la actividad de investigación y desarrollo, y también la vinculación, ha ido organizándose y creciendo. En el caso de la investigación, se han formado núcleos de actividades científico- tecnológicas y existen líneas de investigación ya afianzadas desde hace mucho tiempo, en temáticas vinculadas a la Ingeniería, algunas incluidas en esos núcleos que relataba, y otras que se van gestando.

¿Cuál es la función de esos núcleos? Agrupan personal, tanto docentes investigadores como becarios, que van trabajando juntos y fortaleciéndose en una línea temática, compuesta por diferentes proyectos de investigación.

Pero también hay proyectos por fuera de esos núcleos...
Sí, sí. Hay proyectos vinculados a áreas de las Ingenierías, que no forman parte de los núcleos, pero están creciendo. Los núcleos están afianzados desde hace mucho tiempo y en el seno de ellos se desarrollan varios proyectos asociados a su temática general de investigación.
Se puede hablar de la investigación científica y la aplicada, y entonces la situación de la investigación en la FIO está cobrando mayor desarrollo en el segundo enfoque, porque tiene vinculación con las carreras que se dictan acá.

¿Cómo es la secuencia que lleva al nacimiento de un proyecto de investigación? ¿Hay una estrategia política de la casa, o la inquietud surge desde los propios investigadores? En la mayoría de los casos ha habido una definición estratégica de la FIO, para marcar cuáles son los temas a abordar. Tenemos una Planificación estratégica, desde 2013, que corresponde a esta gestión. Pero también había una definición anterior, que ya contemplaba los temas de investigación, y desde entonces se habían marcado líneas que eran interesantes para la Facultad; si repasamos, se advierte que están vinculadas con lo que hoy se está viendo como fruto de ese pensamiento. Y del mismo modo, vas viendo aparecer temas a futuro, que sería interesante abordar.

¿Son desprendimientos de los núcleos, o aparecen temas nuevos? De los dos. Hay temas que se trabajan en los núcleos y que serán demandados cada vez más, y con nuevos enfoques. Por ejemplo, el tema energético, ambiente y desarrollo sustentable. Ahí hay para hacer muchísimas cosas, en todas las áreas. También está todo lo que es alimentos, a pesar de que ya tenemos un desarrollo muy fuerte en el tema. Y otras puntas van por el lado de la Bioingeniería, la Logística. Entonces uno mira hacia delante y creo que es donde tenemos que trabajar, debemos ir hacia esos temas.

¿Hay algo hecho en esos campos que se mencionan? En nuestra Facultad existen prácticamente antecedentes y producción en todos esos temas. Sin embargo, la demanda es amplia; cada rama asociada y que puede desprenderse de las diferentes líneas de investigación, hace que sea un tema nuevo en sí mismo. De hecho, varios de estos temas se han definido como estratégicos en el Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.

¿Cuál es el estado de situación de los proyectos existentes? Se ha recorrido un camino muy interesante y los proyectos se han ido afianzando. No es menor que tengamos el Doctorado. Quizá veinte años atrás hubiese sido difícil pensar en tenerlo, con becarios vinculados a los Proyectos de la Universidad o del CONICET., y que estudien y se vinculen. Y que esos trabajos y las Tesis tuvieran un carácter tecnológico, de investigación aplicada. Era un desafío pensar en un Doctorado en Ingeniería, y hoy lo tenemos. Y esto va en línea con lo que dice el mismo CONICET. ¿Por qué no tener desarrollos en ese sentido, de investigación aplicada, si lo que necesita el país es desarrollos en Ingeniería? ¿Y por qué no tener gente que se doctore en vinculación con las empresas...este es un gran desafío

¿Esto es lo que marcó el Dr. Cecatto en su visita a Olavarría? En parte sí, de hecho él ha potenciado la idea del proyecto de desarrollo tecnológico y social, que puede nacer en la investigación pero su fin último es el vínculo directo con un adoptante, un demandante de la sociedad o una entidad que forma parte del aparato productivo. Entonces, yo creo que, sumado al camino necesario de la investigación básica y aplicada, también hay que ir hacia estos nuevos desafíos.

¿Y cuál es la foto hoy en relación con la transferencia al contexto? Creo que debemos potenciar el vínculo con el sector social y productivo. Hay muchos esfuerzos de la gente que está trabajando en esto en la FIO. Pero seguramente nos falta un paso más, y pensar que nuestros becarios puedan tener ese carácter de investigación aplicada, y que el resultado de esas investigaciones se transfieran de forma más sostenida. La región, el país necesita de esas cosas. Hay muchos programas a nivel nacional que están queriendo ir hacia ese lado. Hace tiempo atrás el Ministro de Ciencia y Tecnología dijo que los investigadores debíamos sentarnos con los actores del sector productivo para conocer sus necesidades, y a partir de ello ver qué hacemos en la academia.
Las condiciones están dadas: tenemos un desarrollo de varios años en investigación; núcleos afianzados; líneas también afianzadas; un Doctorado en Ingeniería; posgrados acreditados ; un número creciente de becarios, del CONICET, de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, de la CIC; tenemos además una unidad ejecutora de triple dependencia (CONICET-UNICEN-CIC): el Centro de Investigación en Física e Ingeniería del Centro (CIFICEN); entonces las condiciones están, y tenemos una industria que nos rodea y va a demandar cada vez más por respuestas de la academia...

¿Cuál es la percepción del afuera sobre nuestros investigadores? La venida de Cecatto no es menor, es un hecho importante para la FIO y marca un reconocimiento, que el Presidente del CONICET haya visualizado nuestra realidad es trascendente. Y la sociedad que nos rodea nos ve también como prestigiosos. Hay un prestigio en la Facultad, en los investigadores, y en los temas que se están llevando adelante, y siempre está la dicotomía entre los tiempos que maneja la industria y el tiempo que se maneja en la Investigación. Esto es así, hay un sistema en la investigación y se necesita tiempo para las evaluaciones, la producción y difusión de los trabajos. Esto es la realidad, pero es un tema que hay que conocer para trabajar en eso y poder vencerlo... Creo que ese es un gran desafío para la FIO. Se viene haciendo, pero hay que seguir en esa línea.