Asumió la nueva conducción de la FIO

En la última reunión del año del Consejo Académico, Marcelo Spina y María Peralta asumieron formalmente como decano y vicedecana de la Facultad de Ingeniería, al tiempo que fueron designados los nuevos secretarios y directores de departamentos.
Presentadas las postulaciones para cada cargo, los integrantes de los distintos claustros aprobaron la designación de la doctora Adriana Rocha al frente de la Secretaría Académica; del ingeniero Oscar Cabrera en la Secretaría de Investigación y Posgrado; de la continuidad del magíster ingeniero Marcos Lavandera en la Secretaría de Extensión, Vinculación y Transferencia; y del ingeniero Néstor Ferreyra en la Secretaría de Planeamiento e Infraestructura.
En los Departamentos, en tanto, hubo permanencias y recambios. Por un lado, el ingeniero Mario Jaureguiberry seguirá conduciendo el Departamento de Ingeniería Industrial, el ingeniero Roberto De la Vega hará lo propio en el Departamento de Ingeniería Electromecánica, igual que la ingeniera Liliana Irassar en el Departamento de Ciencias Básicas.
Por otro lado el ingeniero Fabián Irassar, que dejó el decanato, pasará a desempeñarse como director del Departamento de Ingeniería Civil. La ingeniera Isabel Riccobene –ex vicedecana-, en tanto, fue designada como directora del Departamento de Ingeniería Química. Y por último, la ingeniera Adriana Bertelle ocupará el cargo que dejó Adriana Rocha al frente del Departamento de Física y Química.
En la reunión, además, se concretó el relevo de los consejeros alumnos.
Como reconocimiento al trabajo realizado, las autoridades salientes fueron agasajadas con presentes personalizados, igual que los consejeros alumnos, distinguidos con diplomas.
Antes del cierre, en los discursos que cada autoridad ofreció al Consejo se destacó la continuidad del proyecto político que desde hace varios años marca el rumbo de la Facultad de Ingeniería de la Unicén. Todos, desde su lugar, renovaron el compromiso para seguir ofreciendo en Olavarría una enseñanza de calidad, con el espíritu latente de la Reforma Universitaria y el estigma de los desafíos actuales de la ingeniería.