Premio Clarín-Zurich a la educación.

 • 27 de diciembre de 2017

 

La entrega de premios fue en el auditorio de la Fundación PROA.

La experiencia científica se redescubre a partir de nuevas herramientas para entender los fenómenos mecánicos, electromagnéticos, o los de la óptica. Una nueva manera de aprender la física con tecnologías de la información y la comunicación. Estas iniciativas didácticas pensadas para el aula moderna son los ejes de un trabajo generado por un equipo de docentes e investigadores de la Facultad de Ingeniería de Olavarría, que días pasados fue distinguido por el Premio Clarín-Zurich a la Educación. Se trata de un concurso nacional destinado a profesores de formación media o superior, que traten sobre capacitación.
Entre los diez finalista del premio, hubo tres menciones especiales. La primera fue para el proyecto de la FIO denominado “IPACT. Innovación curricular para la alfabetización científico-tecnológica”, que integran Bettina Bravo, Mariné Braunmüller, María Aurelia Montero, María José Bouciguez, Mabel Juárez, Adriana Sequeira, Yesica Inorreta, y Laura Ayesa.
El proyecto busca fortalecer la enseñanza de la física y la incorporación de las nuevas tecnologías en escuelas de educación secundaria con orientación en ciencias naturales. Además de promover una innovadora experiencia de aprendizaje en los jóvenes, favorece la formación científica, tecnológica y didáctica de los docentes de ese nivel.
El trabajo premiado se implementó en el Instituto de Formación Docente “Adolfo Alsina” y en la Escuela Nº 6, así como en el Colegio Nuevas Lenguas.
En el marco del proyecto, durante 2017 se dictó una serie de cursos llamados “Newton y el Celular. La enseñanza de la física mediada por TIC”, donde los profesores brindaron asesoramiento científico, didáctico y tecnológico.
Con todo, incentivados por esta distinción nacional, el equipo de IPACT busca consolidar estas estrategias de enseñanza y aprendizaje, con nuevas propuestas, más colegios, innovadoras capacitaciones, y con la idea intacta de fortalecer en los jóvenes el entusiasmo por el mundo científico, y en los docentes el desafío de exponerlo de la mejor manera.