Ante el riesgo de nuevos derrumbes y para preservar la seguridad pública, la Facultad de Ingeniería de la UNICEN recomienda demoler diversos sectores del edificio Cereseto, según consta en el estudio técnico encargado por la Municipalidad de Olavarría a especialistas de Departamento de Ingeniería Civil.
Tras el derrumbe de la planta alta del histórico edificio ubicado en Necochea y Alsina, el Departamento Ejecutivo de la Municipalidad solicitó a la FIO un informe técnico sobre las condiciones edilicias. El objetivo fue evaluar el estado de la edificación existente, en directa relación con las implicancias que pudieran alcanzar a las instalaciones en el lugar y a las propiedades linderas.
El informe fue elaborado por las ingenieras María Peralta y Norma Ércoli, del Área de Estructuras, y por el ingeniero Fabio Arrignón, del Área de Materiales y Construcciones. Ellos realizaron una exhaustiva inspección del edificio construido en 1898, así como en las construcciones linderas, y observaron varias intervenciones recientes. Los ingenieros consignaron la incorporación de varios sectores parciales en plantas de entrepisos de viguetas y ladrillos, un balcón a patio interno, entre otros. El edificio consta básicamente de dos plantas, con todas las paredes de mamposterías de ladrillo asentadas con mezcla característica de la época de construcción.
"Sobre las paredes descargan las estructuras correspondientes a nivel de cubierta y de entrepisos varios. Las paredes exteriores que constituyen el perímetro sobre las calles Necochea y Alsina y las medianeras son de un espesor de 0.45m y altura total en el orden de los 11.50m. Las cubiertas a un agua y dos aguas están constituidas por cabriadas y techo de chapa", detalla el informe.

Riesgos

Los especialistas de la FIO indicaron que "el estado general de la mampostería perimetral del frente sobre las calles Necochea y Alsina presenta sectores con deterioros evidentes, productos del paso del tiempo y escaso mantenimiento, con presencia de fisuras visibles que en algunos casos atraviesan toda la altura del edificio". Asimismo, "existen aún zonas con riesgo de derrumbe en medianeras y en toda la Planta Alta", agregaron.

El derrumbe ocurrido días pasados y las posteriores tareas de demolición habrían generado algunas inestabilidades que no se presentaban antes. "Podrían existir patologías estructurales ocultas no evaluables, producto de las intervenciones estructurales que modifican el diseño original del edificio y el nuevo escenario producto del derrumbe", subrayaron desde Ingeniería. Esto "ha provocado pérdida de integralidad de la construcción", agregaron.

Recomendaciones

El deterioro del edificio Cereseto implica riesgos latentes con posibles implicancias para las personas, para el propio edificio y para las propiedades linderas. Por eso los ingenieros recomiendan impedir el acceso al interior del edificio y delimitar la zona perimetral externa (veredas y estacionamiento vehicular) hasta tanto se termine la demolición actual, que deberá incluir el tanque de agua y la estructura sostén sobre calle Alsina.

También sugieren demoler la mampostería de la cornisa perimetral sobre calles Alsina y Necochea, debido a la posibilidad de desprendimientos dado su estado de deterioro. Y demoler totalmente la Planta Alta. Además, las recomendaciones incluyen rellenar todos los sótanos para contribuir con la estabilidad de la mampostería.
El informe de Ingeniería también sugiere una nueva evaluación cuando finalicen los trabajos recomendados, para determinar la habitabilidad del edificio, o las acciones necesarias para que sea habitable.
Particularmente, mientras se desarrollen las tareas aconsejadas, los ingenieros proponen apuntalar la pared medianera del patio del edificio Mojo, y finalizar las tareas de demolición en ejecución.
Con todo, desde la Facultad de Ingeniería subrayaron la necesidad de implementar las observaciones surgidas tras el informe técnico, atento a los riesgos que todavía persisten, y en virtud de garantizar la seguridad de las personas.